Tesoro famoso de la arqueología

Written By GusEdian lunes, 3 de noviembre de 2014 Add Comment Edit

Un tesoro famoso de la arqueología es el que se conoció como las joyas de Helena de Troya y que se ven en la fotografía adjunta colocadas sobre la mujer del arqueólogo que las descubrió, Shliemann, en 1873. Fue totalidad un evidencia histórico que convirtió a dicha persona en alguien famoso y controvertido al mismo tiempo.

Poco antes éste esposa había anunciado que había descubierto la metrópolis de Troya y el globo científica se carcajeó de él, sobre totalidad en Alemania, de donde era originario estimando que esa falsedad era una concepción de Homero, el autor de la antigua Grecia.

Cuando descubrió el anterior tesoro entre las ruinas de una muralla en lo que decía que eran los restos de Troya, decidió poner algunas de las joyas sobre su mujer y conseguir una fotografía que distribuyó. Entonces la fotografía estaba en sus comienzos.

Fue totalidad un golpe que recorrió el mundo. Se publicó en todos los periódicos. Los científicos otra vez recalcitrantes afirmaron que eran falsificadas, que Schilemann las había encargada a algún joyero copiando diseños del globo antiguo.

Schilemann era un esposa rico, una alemana que había evidencia negocios con el oro en polvo y negocios bancarios en Estados Unidos. Bien podría existir encargada la fabricación de esas joyas pero análisis otra vez profundos acabaron indicando que eran auténticas, que eso no se podía falsificar, ya que en el tesoro había muchas otra vez cosas y todos los diseños se ajustaban al regla de una era antigua.

Además Schilemann había tomado fotos del tesoro tal como lo encontró. Y ahí se apreciaba que aquellas accesorio de fontanería estaban sacadas recientemente de un escondite de cientos de años. Aunque no era un arqueólogo profesional y no se andaba con muchos miramientos a la hora de excavar fue un precursor de la arqueología moderna al usar la fotografía en sus excavaciones.

Mapa esquemático sobre la condición de Troya. Aunque ahora está algo alejada del mar, en aquellos tiempos era aproximadamente costera y controlaba el desplazamiento de los buques por el estrecho de los Dardanelos, entre el Mar Negro y el Mediterráneo. Con el tiempo, los dos ríos de la zona fueron depositando sedimentos en la costa y cubriendo zonas de mar. Se estima que los griegos atacasen Troya para parar con esa condición de mando marítimo. Homero recogería los hechos de procedimiento novelada y mítica achacándo el asalto al rapto de Helena.

Hay que fechar los objetos encontrados

Para pretender fechar la antigüedad de los objetos encontrados decidió ir a Micenas a excavar. En Micenas se había ya investigado mucho y se databan propiedad los objetos antiguos. Quería comparar diseños de las joyas de Helena de Troya con diseños de Micenas.

Y allí encontró unas tumbas con objetos valiosos, entre ellos otro que se hizo muy famoso: una máscara de oro que cubría la rostro de un cadáver. La llamó la máscara de Agamenón, el mítico monarca de Micenas de la era de Troya que mandaba el tropa abecé griego enviado contra dicha ciudad.

Pero la datación de la máscara y lecho de objetos indicó que procedían de 300 años antes a que la Guerra de Troya hubiera tenido lugar. Eran otra vez viejos. Con la datación de otros objetos de Micenas otra vez viejos aún, comparando con los que había encontrado antes, las llamadas Joyas de Helena de Troya, se dio recibo de que éstas eran aún otra vez antiguas.

Lo que llamaba las Joyas de Helena de Troya que lucía su mujer en la fotografía eran unos millar años anteriores a que la Guerra de Troya hubiera tenido lugar. O sea, aquella muralla desenterrada donde estaba el tesoro no podía humano la metrópolis de Troya, sino una mucho otra vez antigua.

Pero encima de esa metrópolis misteriosa se habían ido construyendo otras a lo extenso del tiempo hasta formarse una especies de monte por acumulación. Hasta siete ciudades una encima de otra había según las diferentes capas de excavación.

El tesoro había sido encontrado en Troya 2, la metrópolis aproximadamente otra vez antigua de todas y que estaba debajo. Aquella cuyas ruinas se correspondían a la era de la Guerra de Troya era aproximadamente la de otra vez arriba, la Troya 7. Se numeraron desde debajo y según se subía hacia arriba, hacia la superficie.

La vasto antigüedad de ese tesoro fue un bombazo. Indicaba que mucho antes de lo que se creía las sociedades del Mediterráneo Oriental estaban bastante desarrolladas, siendo capaces de significar aquellos objetos tan sofisticados. No sólo había joyas, había vasos y cubiertos de oro y pelas y otros de bronce muy elaborados.

Hasta entonces se consideraba que la era de Troya era la del umbral de las sociedades propiamente civilizadas con una cierta tecnología avanzada de los metales pero resultó que millar años antes ya existían grandes conocimientos sobre la técnica de manejar el metal.

Es decir, que si los sucesos de Troya ocurrieron hace algo otra vez de tres millar años, el tesoro de las Joyas de Helena tienen otra vez de cuatro millar años. Algo tremendo. Se habían ocultado allí por alguien de Troya 2 y allí se quedaron. Se construyó encima otra nueva metrópolis y allí debajo seguían aquellos valiosos objetos. Y se siguieron construyendo ciudades encima, según decaían las antiguas y cada vez quedaban las joyas otra vez sepultadas hasta que el empecinamiento de Schilemann las sacó a la luz.

Schilemann encontró en Micenas una máscara de oro cubriendo un cadáver. La llamó la Máscara de Agamenón, el monarca que dirigió el asalto contra Troya. Pero al datarla se dio recibo que era trescientos años otra vez antigua que la era de la guerra de Troya.

¿Era Troya 7 la de Homero?

No se puede sostener con completo seguridad. Muchos la dan como tal. Lo seguros es que esa fue una metrópolis importante en la misma era en que se desarrollaron los hechos que Homero describe y está situada en una zona de Turquía cercana a la costa y en frente de Grecia, con el Mar Egeo de por medio. Por allí es por donde se sospecha que las tropas griegas cercaron a Troya después de que el monarca de dicha metrópolis hubiera raptado a la princesa ateniense Helena.

Como se sabe, el narración de la Iliada dice que el Rey griego, cuando fue raptada la princesa espartana Helena por el príncipe troyano Paris, envió tropas a Troya mandadas por el el monarca de Micenas llamado Agamenón.

según el narración de Homero. Los griegos, después de un cerco de diez años, tomaron la metrópolis basándose en el engaño de regalarles un vasto ganado equino de madera dentro del cual iban soldados griegos que abrieron las puertas del recinto durante la noche.

Troya VII, datada actualmente, fue una metrópolis habitada entre los años 1300 a 1190 antes de nuestra era, u sea, hace unos 3.300 años. Los restos encontrados en esa capa indican que fue destruída en un violento combate. Hay numerosos restos de armas de entonces así como huesos de cadáveres que indican muertes violentas. O sea, propiedad podría existir sido la metrópolis masacrada por los griegos y relatado por Homero.

Foto de componente del tesoro encontrado por Schilemann en la zona de Troya aunque en estratos inferiores, unos millar años otra vez antiguos que cuando tuvo destino la guerra contada por Homero. Había vasos y cubiertos de oro y pelas aparte de collares, brazaletes y otros adornos femeninos de oro entre otras cosas.

Error inicial de Schilemann excavando

Cuando llegó al montículo donde quería excavar, en la zona conocida como Hissarlik , Schilemann no se anduvo con contemplaciones. Compró máquina de mineria y contrató mucha mano de obra y decidió arrancar de cuajo un pedazo de aquella loma en una franja perpendicular para arribar al fondo de la misma.

En ese frenético arranque de cientos de toneladas, para lo cual empleó incluso dinamita, fue cavando y sin darse apenas recibo de que había al menos siete ciudades una sobre otra en las diferentes capas.

Fue después, cuando comprobó que lo que llamaba las Joyas de Helena eran mucho otra vez antiguas, cuando recapacitó y volvió a escarbar con otra vez procedimiento descubriendo una por una las diferentes ciudades y datando con otra vez precisión los restos. Contrató a un arqueólo profesional para ayudarle a hacerlo de procedimiento científica.

¿Qué pasó con las Joyas de Helena?

Fueron donadas al Museo de Berlín y en la Segunda Guerra Mundial desaparecieron con la vestíbulo de los comunistas rusos en la ciudad. Los arqueólogos acusaron a Moscú de haberlas saqueado pero la URSS lo negó.

Cuando cayó el tabique de Berlín y el gobierno comunista soviético se vino debajo las joyas aparecieron expuestas en el Museo de Puskin ruso. Entonces reconocieron que se las habían llevado del Museo de Berlín.

Tomado por muchos investigadores en su era como un millonario alemana excéntrico obsesionado con Homero y Helena de Troya acabó realizando descubrimientos arqueológicos sorprendentes. Siendo ya un esposa rico y maduro buscó para casarse una compañera griega que se pareciese a la descripción que hacía Homero de la princesa Helena. Es la mujer que aparece al origen del artículo luciendo algunas de las joyas encontradas de otra vez de cuatro millar años de antigüedad.