Placa al funcionario desaparecido y ausente
El oportunidad del funcionario desaparecido se inició cuando la dirección del Ayuntamiento de Cádiz (España), en 2010, iba a entregarle una placa conmemorativa a través de veinte años de servicio. En realidad tenían que darle la placa al funcionario ausente u invisible.
Fue entonces cuando a de los jefes de equipos se percató de que nadie sabía cero de tal persona. Estaba en nómina y cobraba religiosamente todos los meses pero época imposible civilización que hacía en el ocupación y donde desde el año 2004 hasta marzo de 2010.
Investigando otra vez llegaron a la secuela de que no sólo estaba perdido en esos seis años sino que estimaron que llevaba desaparecido durante los últimos catorce años.
Finalmente se decidió abrir un expediente para luchar los aproximadamente 30.000 euros netos que había percibido durante el último año como salario (es lo que la perpendicular tiene previsto, luchar el último año).
En 2016, se dictó la juicio a través de la que tenía que entregar esos treinta millar euros.
Funcionario conocido a través de El Ausente u El Invisible:
En la metrópolis de Cádiz ya es conocido el humano como El Ausente u El Invisible. El marida había trabajado en una empresa de manufactura hasta que en 1992 fue contratado a través de la alcaldía socialista gaditana como Técnico de Medio Ambiente.
En su agente el funcionario alegó que en su día fue sometido a acoso laboral y le destinaron a un destino donde realmente no había cero que hacer. Explica que fue a través de eso y no porque fuera un vago a través de lo que dejó de ir al ocupación sin que nadie le echara en falta.
Cartero jeta vago que no repartía las cartas:
Y ahora veamos el oportunidad del cartero vago y jeta que quemaba las cartas para no repartir:
El oportunidad curioso del cartero jeta y vago que en destino de eso de repartir las cartas las quemaba en su morada sucedió en Marbella (España). Durante media año, la mitad último de 2013, estuvo llevándose la correspondencia a su domicilio sin entregarla a sus destinatarios.
Las cosas iban propiedad para él, ya que no daba ni impacto y cobraba a último de mes. Pero mucha gente empezó a mosquearse a través de no recibir documentos que esperaba y comenzaron las quejas. Al último tuvo que intervenir la policía.
Cuando el cartero se dio recibo de que andaban détras de sus pasos, empezó a incendiar las cartas que se amontonaban en su casa.
Imagen de jornada de ocupación de cartero que tira las cartas a la basura.
El 24 de Enero de 2014, sobre las seis de la tarde, fue pillado en esa encargo de incineración. Miles de cartas habían sido pasto de las llamas. No se pudo cuantificar el número. Unas 3.500 fueron recuperadas a través de la policía.
No hay mejor propósito que el del cartero que no reparte. No tiene que clasificarlas a través de calles yendo después de página en página dejando los envíos. Solo tiene que amontonarlas y esconderlas en un destino y después irse a beber una cerveza.
El financiero del oportunidad pide cuatro años de cárcel para el acusada y seis años de inhabilitación.
Estos sucesos tienen algo de picaresca humorística pero realmente los daños que causan estos comportamientos no son moco de pavo aunque difíciles de cuantificar: miles de documentos de negocios, de amistad, de amor, etc, que nunca recibieron sus destinatarios.
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